La obesidad desangra la economía de EE. UU.

Las pérdidas económicas que Estados Unidos sufre por culpa de los empleados que padecen de obesidad ascienden a unos 153.000 millones de dólares anuales, según Gallup, una empresa norteamericana que investiga temas sociales y de opinión pública. La suma supera en casi cuatro veces el mismo indicador en el Reino Unido.
La obesidad causa problemas de salud como hipertensión o asma, entre muchos otros, y como consecuencia, los obesos pierden 450 millones de días laborales más que sus colegas que no padecen de estas enfermedades.
Además, el estudio de Gallup muestra que un 68% de todos los trabajadores de EE. UU. tienen al menos una enfermedad crónica, por ejemplo diabetes o depresión. Hay solo un 14% de personas sanas en el país y sus bajas por enfermedad no superan los cuatro días anuales.
Otros estudios muestran que el nivel de obesidad en EE. UU. sigue creciendo. Aumentó en la tercera parte de los estados durante el año pasado y no se redujo en ninguno. La epidemia de sobrepeso sigue siendo más amenazante en el sur del país. Los diez estados más ‘gordos’ son Missisipi, Alabama, West Virginia, Tennessee, Louisiana, Kentucky, Oklahoma, Carolina del Sur, Arkansas y Michigan en orden descendiente.